Orgullo browniano: equipo de natación compitió en Aruba
El grupo, que entrena en la pileta del club Defensores de Glew, viajó a la isla caribeña para participar de un campeonato que se realiza todos los años y reúne a nadadores de diversos países. Almirante Brown estuvo muy bien representado.
Luego de mucho entrenamiento y una gran cuota de esfuerzo y dedicación, el equipo de natación de Defensores de Glew compitió en el “Aruba Dolphins Invitation”. El torneo se realizó entre el 4 y el 6 de noviembre en el poblado de Savaneta, donde participaron once jóvenes nadadores del distrito que lograron resultados muy positivos para el grupo más allá de los logros individuales.
Acompañados por el entrenador Iván Wolovich, la delegación estuvo integrada por Franco Maturana, Nazareno Vargas, Lucas Ochoa, Santiago Ramírez, Ignacio Borre, Nicole Scardamaglia, Marian Rodríguez, Lucas Escobar, Juan Domínguez, Ernesto Mohorsic y Alexis Albarracín.
En total trajeron 27 medallas y, en muchos casos, también pudieron bajar los tiempos en varias de las pruebas que concretaron. Y si bien la competición fue más que destacable en el plano del deporte, los protagonistas resaltaron sobre todo la importancia de la experiencia en sí misma.
“Fue un torneo muy lindo, la pasamos muy bien con los chicos y esperemos que se pueda repetir. El año pasado ya habíamos viajado con Ernesto, pero este año estuvo mejor porque pudimos viajar con todos y nos sirvió mucho para unirnos como grupo”, relató a Diario 24 Noticias Lucas Ochoa, quien se mostró entusiasmado con la idea de que el próximo año puedan repetir la hazaña.
Como en tantas otras disciplinas deportivas que se practican de manera amateur, todos los gastos corren por cuenta de los atletas. Por esa razón, la participación en este tipo de actividades demanda mucho trabajo, implica una ardua tarea que excede los límites del espacio y el tiempo de entrenamiento.
Sin auspiciantes ni ayuda proveniente de ninguna entidad, la energía y la voluntad familiar -sumada a la colaboración de la comunidad deportiva- fueron dos factores imprescindibles para que la idea se pudiera concretar.
“Fue un sacrificio grande que viajen pero valió la pena, es un lugar hermoso. Durante todo el año, los papas hacemos rifas, bingos y torneos y meda dulce y con eso juntamos algo para que puedan viajar”, detalló este medio la mamá de Lucas, Nancy Calamano.
Hacia adelante, la apuesta consiste en que este grupo de deportistas siga creciendo y cuente con los medios para poder hacerlo. Está claro que la semilla germinó y ya comenzó a dar frutos.