Hasta Siempre Jules
Automovilismo
Por Jonathan Romero
El piloto francés de 25 años falleció el viernes luego de pasar nueve meses en coma, tras el accidente sufrido el año pasado, durante el Gran Premio de Japón. Dolor y muestras de cariño hacia él y su familia en todo el mundo.
Una noticia que nunca es buena escuchar, quiso el destino o la casualidad que justo este fin de semana no se disputara el GP de Alemania, que coincida con la fecha de fallecimiento de un grande como lo fue Juan Manuel Fangio y que Max Chilton, su compañero en Marussia, consiguiera una victoria en Indy Car. Tras nueve meses de luchar por su vida, el cuerpo de Jules Bianchi dijo basta.
Un piloto con un gran talento y mucho por delante. Ferrari, que ya había descubierto el potencial de Jules a futuro, lo había fichado como piloto de reserva, por lo que en 2012 empezó su carrera en la Fórmula 1, primero como tester deForce India y desde 2013, finalmente pudo debutar en la escudería Marussia (ambas utilizaban motores del Cavallino Rampante). Aunque era el auto más lento de la temporada 2014, Bianchi se las había arreglado para sumar los únicos dos puntos que obtuvo el equipo ese año.
Lamentablemente, esa misma temporada durante el GP de Japón, bajo una intensa lluvia, Bianchi perdió el control del auto y terminó impactando contra una grúa que retiraba el Sauber de Adrian Sutil, quien también se había despistado en ese mismo sector. Tras el violento choque, el piloto de Marussia fue trasladado al Centro Médico General Mie en estado crítico. Meses después y por pedido de su familia, fue llevado a un hospital de Niza, en Francia, su lugar de nacimiento.
Allí, debido a las lesiones cerebrales que sufrió, se mantuvo en coma inducido aunque estable, hasta que el fatídico 17 de julio pasado, sus padres informaron su fallecimiento: “Jules luchó hasta el final, como siempre hizo, pero hoy su batalla terminó (…) Al escuchar y leer todos los mensajes nos dimos cuenta de cuántotocó los corazones y las mentes de tanta gente por todo el mundo”, expresó el triste y doloroso comunicado.
Los mensajes de apoyo y condolencias a sus seres queridos se repitieron en toda la comunidad automovilística. Tal vez, uno de los más emotivos fue el de Max Chilton que logró su primer triunfo en la categoría americana de Indy Car: “Realmente quería ganar esta carrera. Se la dedico a él. No fue fácil y estoy seguro de que si Jules hubiese estado, habría conseguido la pole. Él era uno de esos pilotos que estaba destinado a cosas grandes”.
Fue el accidente más grave en la Fórmula 1 desde la muerte de AyrtonSenna en 1994, un hecho que llevó a la FIA a replantear todo el sistema de seguridad, tanto de los autos, como el de los procedimientos para remover un auto de la pista. El automovilismo es un deporte de riesgo y los pilotos saben el peligro al que se enfrentan, pero esperemos no tener que volver a relatar un desenlace con este trágico final.
