Trata laboral en Bernal
Mediante un operativo conjunto se rescató ayer a un grupo familiar de 8 personas oriundas de Santiago del Estero, con 6 hijos, de edades entre 5 meses y 19 años que eran obligados a trabajar 12 horas por día en una carbonería del Barrio La Paz en Bernal Oeste en condiciones infrahumanas.
Pocas veces una crónica de casos de trata puede conmover como el de la familia que fue rescatada ayer, ya que desde hace 3 años eran explotados y denigrados en todo lo relacionado a su condición humana.
El padre, de nombre Jorge llegó desde el interior en 2016 con la ilusión de forjar un futuro próspero y digno para su familia, nada más alejado de la realidad. Con promesas falsas trajo a sus seres queridos con la promesa de que tendrían trabajo y vivienda para todos.
La propuesta vino de un comerciante quilmeño, Dagoberto Suárez que aprovechó una visita al norte del país para contactarlo a Jorge y convencerlo de que irse con él era la mejor opción. El hombre no dudó y se embarcó en el viaje sin imaginarse que a kilómetros de su casa iban a ser tratados como esclavos en pleno siglo XXI; obligados a pasar sus días en condiciones propias de la Edad Media.
Cuando llegaron, el panorama fue muy distinto al que se imaginaron. Jorge y su familia no se instalaron en una casa tal como se les había prometido. En realidad, Suárez los llevó a vivir en un viejo depósito en Quilmes de su propiedad, donde también los obligaba a trabajar durante varias horas al día envasando carbón; trabajaban los 8 por 200 pesos diarios, cocinaban al aire libre y a leña.
Al comienzo toda la familia dormía en un único colchón y no tenían camas ni muebles de uso cotidiano. Eran esclavos. Incluso, Suárez los dejó indocumentados. Apenas llegaron a la carbonera, el comerciante les pidió sus DNI para gestionarles nuevos documentos pero el tiempo pasó y nunca lo hizo.
A los meses fueron mudados a una vivienda, peor que donde estaban originalmente. Se trata de un construcción hecha de material, con techo de loza y piso de cerámica. Cuenta con una habitación y un baño instalado dentro del mismo dormitorio. Después de que trabajadores sociales de la Municipalidad de Quilmes visitaron el lugar tras la denuncia de una vecina pudieron observar que el sector de la cocina se encontraba bloqueado con una madera porque tenían prohibido el paso. Es decir, debían cocinar con leña y al aire libre. En ocasiones, algunos vecinos les prestaban la cocina.
En la habitación había dos camas: una de dos plazas y otra de una. Sin embargo, al ser entrevistado Jorge comentó que sólo podían usar una porque la otra era de la propietaria de la casa. Como al principio, seguían durmiendo todos en un mismo colchón. De igual forma, tenían prohibido usar algunos los muebles porque también le pertenecían a la dueña del lugar.
En la carbonera el hombre trabajaba junto a sus dos hijos mayores por 200 pesos en total y durante 12 horas por día.
El padre de familia le comentó a los empleados municipales de Quilmes que «su patrón» les dijo que el resto del dinero por el trabajo sería destinado al pago del alquiler. Una obligación que nunca cumplió.
Respecto de la situación sanitaria, el grupo familiar no presentó problemáticas de salud graves, aunque sí se descubrió que hace mucho tiempo que no se realizan chequeos médicos. Además, Jorge comentó que los niños estuvieron afectados de los bronquios cuando vivían dentro de la carbonera y que actualmente padecen vómitos y malestares, pero que desconoce si tienen relación con el carbón.
Con la cantidad de elementos colectados, la Municipalidad de Quilmes dio intervención a la Justicia. Fue así que el fiscal Daniel Ichazo de la UFI 1 de Berazategui procesó a Suárez por el delito de trata laboral.
Los investigadores secuestraron, además, teléfonos celulares, notebooks, discos rígidos y distintas anotaciones. Al hijo del comerciante, un joven de 21 años identificado como Nicolás Suárez, le incautaron también su teléfono, cuadernos y talonarios.
Por lo pronto, a Jorge y su familia se les entregaron colchones, frazadas y mercadería y se ordenó hacerles el DNI. Se especula que la Justicia convoque a los imputados en las próximas horas.
Fuente: Medios del Sur.